Las dificultades en la comprensión del entorno incluyen los aspectos temporales y entre ellos la duración de las actividades que, al no conocerse, puede producir en numerosas ocasiones ansiedad o problemas de conducta asociados. El uso de temporizadores que indiquen de forma visual la cantidad de tiempo que va a transcurrir, puede ayudar notablemente a superar las dificultades mencionadas.

Esta situación se hace especialmente latente en los tiempos de espera sin estructura en los que la persona presenta dificultades para la autogestión. Una aplicación que proporciona medición del tiempo junto a posibilidades de interacción, se convierte pues en un buen recurso para entretener estos tiempos.